domingo, 12 de diciembre de 2010

MOMENTOS DE MAGIA.

Y, en un cruce de palabras, surgió un destello,
Le preguntó:
¿Con quién tengo que hablar?
Y al momento, sus sueños salían por su boca enlazados, con ideas estupendas que, no estaban escritas , ni desarrolladas, ni tan siquiera pensadas, solo eran pañuelos de colores atados por una punta, que, como por arte de magia, salían de su boca y se extendían ante él, que con los ojos muy abiertos recogía ordenadamente los pañuelos, los doblaba y los colocaba con interés, con su cabeza asintiendo, ¡magnífico proyecto!, ¡magnífico proyecto!.
Cuando terminó la exposición, sintió un mareo como los del vertigo y un gran nudo en el estómago, un gran vacío.
¿Y ahora qué?
Ahora a esperar...

3 comentarios:

  1. No sé por qué pero me ha hecho recordar a nuestra querida y ya ausente Manuela Rejas, quizá sea porque estoy recopilando los escritos sobre ella.
    De cualquier forma, que la espera sea fructífera y que la magia haga realidad esos proyectos.

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  2. Y así es la vida..una continua espera...perdón llego tarde a otro sitio...seguro que ya se cansó de esperar otra vez... hermoso relato, amiga.

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  3. Bellísimo relato para ilustrar la agonía de la espera cuando se explican con expectación los sueños proyectados

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