sábado, 17 de septiembre de 2022

Justicia terrenal


Marca la hora un reloj lejano y el secretario sale del despacho, sopeso en el bolsillo la pequeña howlita. Me relaja.

Sonrío, quién dijo aquello de si no te gustan mis ideales… Yo tengo estos y los que hagan falta, uno por caso. También Lidia acude al recuerdo, aquella medio bruja y sus flores de Centaury, aseguraba que con ellas mis convicciones se mantendrían firmes, sin influencias.

 Tal como se hacen estás cosas estamos el abogado, su cliente y el sobre del dinero. Justicia, la diosa más ingenua, está tras ellos con sus ojos vendados, parece distraída.




Micro escrito siguiendo la propuesta del mes de septiembre de: El blog de Lidia, texto de menos de 100 palabras, relacionado con la carta, en él tiene que aparecer el mineral howlita (turquesa blanca) y opcionalmente mencionar las flores de Centaury.



viernes, 9 de septiembre de 2022

Paredes mudas

 

Esperanza espera. Fotografía de @elemojer



El sol se muestra insolente a esta hora en la que la ciudad pierde la memoria, mientras espero, la sombra menguada no ofrece un refugio sólido, los edificios muestran su cara atemporal, que es, a la vez, la del ahora y la del tiempo pasado.


A través de las grietas se filtra la memoria del lugar, susurros de amores furtivos se sobreponen a las risas infantiles. De puntillas se asoman los lamentos sordos que  estas paredes ciegas guardan.

Paredes desnudas, hermanas del silencio de los cementerios, en su soledad resuena el eco de disparos que nunca escuche y que aún se resisten a ser olvidados.


lunes, 8 de agosto de 2022

Ante la certeza

 


Fotografía de Jimmy Chang en Unsplash



 Relajarse, respirar hondo, abrir la mente, dejar salir las dudas y admitir… 
aunque parezca tarde, que andas perdido.


sábado, 16 de julio de 2022

El Club de la Microficción Nº 4

 


Muy buenas a todos, hace ya unos días que David Rubio cerro la quinta temporada de su blog: El tintero de oro. 

Para que no nos aburramos en las vacaciones ha publicado una nueva recopilación en la que también tengo el honor de participar.

Aquí os dejo el enlace para su descarga gratuita en Lektu.

Lektu - Descargar Ebook El Club de la Microficción nº 4: Fan Fiction

En este enlace se puede leer sin necesidad de descarga. 

El club de la Microficción 4 Fan Fiction (yumpu.com)

Espero que os guste. Feliz verano a todos.



miércoles, 29 de junio de 2022

La fuente

 

Fotografía de Paolo Celentano en Unsplash



Era un hilito de agua delgadito e insignificante, sin nada de particular. Lo que hacía de esa fuente algo especial eran los sueños que regalaba a todo aquél que la escuchaba.

Cuando remodelaron la plaza nadie la echó en falta y nadie se dio cuenta de que soñar cada vez era algo más extraño, hasta que los sueños se secaron del todo, los gorriones se ausentaron y la vida se tornó un lugar gris en el que la ilusión pasó a ser algo sospechoso.


jueves, 23 de junio de 2022

ESCRIBIENDO RELATOS A HOMBROS DE GIGANTES

 



Buenas, David Rubio vuelve al ataque con una nueva recopilación de relatos, en la que también participo.

Espero que os guste y la disfrutéis, aquí dejo el enlace para su descarga gratuita:

Lektu - Descargar Ebook Escribiendo a hombros de gigantes nº 4: Truman Capote y Desayuno en Tiffany's

domingo, 19 de junio de 2022

La siesta

Fotografía de Marco Aurelio Conde en Unsplash

 Procuro no mover un músculo y a pesar de ello el sudor perla mi frente, el sofá insiste en abrazarme de modo amenazador, quiere tragarme.


Escucho entre brumas el rumor que produce la puerta del garaje del vecino. Ya han llegado.

Pronto repetirán la canción, los gritos por lo general están teñidos de cierto histerismo. No recuerdo que la niña en ningún momento suplique o pida perdón por los insultos, lo que escucho cada tarde es la voz de su padre tratando de que se calme.


Esta tarde las voces reverberan llenando con su presencia la penumbra, todo es irreal, el bochorno y la oscuridad consiguen que el sonido parezca nacer de forma espontánea en medio de mi salón. El tiempo se ha vuelto pegajoso. Tumbado, ni yo mismo creo ser real.

Y sin embargo algo cambia en un momento. El silencio se sobrecoge. Lo terrible impregna el ambiente.


Cuando sonó el timbre, no tenía duda de qué sería él. Entró con una cuerda en la mano, quería que por favor, le dejara pasar al patio.

―Creo que ha sido el calor― me dijo sin tan siquiera alzar la mirada del suelo.


Debí dormir un par de horas antes de avisar.

No he querido conocer los detalles… En cuanto le descolgaron me prometí cortar el árbol.


domingo, 5 de junio de 2022

En vela

Fotografía de Skylar Kang en Pexels


 Se marchan decepcionados, la visita como cada noche ha terminado en nada.

Mis fantasmas son insistentes hasta dar lástima.

Tal vez una de estas noches les prepare una fiesta a ver si se alegran…o asustan y me dejan en paz.


sábado, 28 de mayo de 2022

EL CLUB DE LA MICROFICCIÓN Nº 3: ¡LEYENDAS URBANAS!

 


Hoy os presento otra colección de historias recopiladas por David Rubio a través de su blog: El tintero de oro. En este numero se incluye un micro escrito por mi, presentado en su momento en este blog.

Aquí dejo el enlace para la descarga gratuita en Lektu:

Lektu - Descargar Ebook El club de la Microficción nº 3: Leyendas urbanas

También se puede leer en Yumpu, sin necesidad de descarga:

El club de la microficción nº 3 Leyendas urbanas (yumpu.com)

Quiero dar las gracias a David Rubio por el trabajo que se toma a la hora de confeccionar la revista  sus ilustraciones.

Un saludo a todos, espero que os guste.

domingo, 22 de mayo de 2022

Que arda Babel

Fotografía de Anthony Rao en Unsplash

El humo ensucia la imagen y a pesar de lo aberrante de la escena en ella hay oculta cierta poesía. Las pavesas caen encendidas sobre nosotros. La palabra viaja con el viento.

Venerables ediciones son profanadas, sus hojas desgarradas con saña asemejan pájaros negros que vuelan directos a la hoguera, 

El tiempo se desliza sin prisa,  juega a esconderse entre la luz y con ella van las palabras, se ordenan por sí solas.

«Allí donde se queman los libros, se acaba por quemar a los hombres». Cuánta verdad.

La soberbia les hace pensar que cualquier atropello es gratuito.

Hace rato que los abandoné, salí asegurando bien las puertas tras de mí. En su borrachera de devastación, ni se fijaron. Lo de menos fue hacer que ardiera la casa.

Ahora, gritan encaramados a las ventanas, el terror les ha hecho perder la arrogancia.

Nadie a mi alrededor parece prestarles atención, absortos; solo hay ojos para un tesoro que arde.


Pd.: Relato escrito siguiendo la propuesta del Blog Acervo de Letras: VadeReto, correspondiente al mes de mayo.


miércoles, 18 de mayo de 2022

Recital de poesía

Por si os interesa, un amigo ha preparado un festival de poesía en la terraza de su bar.
Bar El Candil Yuncler (Toledo).
Sábado 21 de mayo - 20:00 h

viernes, 13 de mayo de 2022

No chilles

Fotografía de Ross Sneddon en Unsplash



 En el vagón el ruido ha cesado, la paz tapiza de sangre los cristales. El cuchillo tiembla asustado.

Sólo una chica, al fondo, se levanta encerrada en sus papeles, abandona el vagón sin ser consciente de lo sucedido.


Desde el andén vacío, la muchacha, ahora sí, mira hacia aquí, en su desconcierto se refleja el pánico.


Al cerrarse las puertas el ruido regresa, no soporto la imagen de esa mujer que grita con la mirada.

¡Por favor... ! ―no chilles.



Pd.: Micro escrito desde otro punto de vista del micro: Plectro de Manuela Fernández Cacao, publicado en su blog del que aquí os dejo el enlace:


viernes, 6 de mayo de 2022

Demasiada suerte


 Más tarde lo sabré, he tenido el exclusivo honor de que un meteorito casi acabe conmigo.

―¿No es fabuloso? El único ser humano en la historia en ser acertado como un conejo entre las orejas. ―Pero como digo, eso será más tarde cuando lo sepa.

De momento, en mi cabeza, corría perseguido en una espiral sin fin por Palas (no me preguntéis cómo supe su nombre), una asteroide desmesurada y loca, qué quiere que me case con ella. 


Ahora, que estoy recuperado del golpe, la busco con el telescopio.

―¡Que ya compré el traje y las alianzas!―



Pd.: Micro escrito para la convocatoria del mes de mayo de Escribir Jugando de: El blog de Lídia. Con un máximo de 100 palabras, inspirado en la carta y el dado, siendo opcional hacer una referencia al primer asteroide.


domingo, 1 de mayo de 2022

Cerveza caliente

Fotografía de Vaughan Willis en Unsplash

 En el plato huesos de aceituna abandonados y en la boca la amargura de un trago largo; largo y tibio.

La hora del aperitivo, sin final aparente, esconde un anhelo de pantalones cortos y rodillas desolladas.

En la memoria se recrean las carreras en la plaza, el pan con vino y azúcar. Los cromos, las chapas; las bragas de Pilu. Domingos soleados de misa, paseo y paella. Carruseles de vencejos. La ilusión por ser el que más lejos meaba. Aquellas revistas leídas a escondidas, la siesta, las picaduras de mosquito.

Mamá llamándonos a merendar. El, un, dos, tres…


―¿Qué le echarán a esto…? ―Qué recuerdo tantas gilipolleces y no, que he hecho con el mechero.






sábado, 23 de abril de 2022

La pequeña Frankenstein

La luz regresa y yo permanezco en el desconcierto.

La película aún la tengo clara, la criatura atravesada por el rayo vivificante, sus ojos abriéndose…


Meter los dedos en el enchufe no es lo mismo, aparte del latigazo que me ha sacudido.

La muñeca mantiene la mirada vidriosa, no respira, ni hace nada.

Mamá, ha llegado zapatilla en mano. Ella sí que me va a devolver «a la vida».


lunes, 18 de abril de 2022

Las cualidades del humo

Fotografía de Sander Sammy en Unsplash

 En su trabajo y para asuntos como este, un sombrero Fedora es indispensable, lo mismo que es imprescindible el cigarrillo, porque en casos así fumar es un clásico y es muy oportuno que el humo del tabaco sea el responsable de unos ojos vidriosos


Ella ciertamente se merecía otra cosa, en los días que llevaba siguiéndola había sido incapaz de encontrar nada reseñable, salvo que era ancha de caderas y lucía un peinado anticuado qué no le favorecía. Lo de su risa atolondrada, hasta le proporcionaba cierta gracia.

Justo lo contrario que el amargado que lo contrató, un tipo elegante de mirada dispersa, obsesionado con saber que hacía su costilla cuando él no estaba.


En aquella tarde oscura tanta tranquilidad alteraba sus instintos, algo no terminaba de funcionar.  

Cuando entró, el apartamento se diría que contenía la respiración, apresaba el silencio. La luz de los neones jugaba a las sombras con una persiana mal ajustada.

Papel pintado y un centro de flores ajadas trataban de dar sensación de hogar, algo que un zapato fugitivo y una silla fuera de lugar echaban a perder.

―Hoy, no ha sido un buen día. ―se dijo.

El peinado de ella definitivamente parece arruinado. Y, ojo de puta, como él lo llamaba, por fin había logrado centrar la mirada.


No aguanta ver sus sangres mezcladas empapando el suelo. La boca le amarga.

Necesita un trago con urgencia.


En la calle, los indigentes rebuscan en la basura, los perros se persiguen el rabo y la gente pasea indiferente… la vida no se da por aludida.

Mientras se aleja, crece el ruido de sirenas, se sube el cuello de la gabardina y recoloca el sombrero. El humo de un cigarro protege al mito en su huida, oculta la tristeza, debe mantener a flote su imagen de detective duro.



Pd.: Relato presentado fuera de concurso en el blog: El tintero de oro, en la edición dedicada a la novela El Halcón Maltes de Dashiell Hammett.

viernes, 15 de abril de 2022

El bosque de Verdún

 

Fotografía de @soblowingclouds

Cuando en el aire reverbera el tañido lento de las campanas, creo llegado el momento.

Con un sol que declina. La tarde avanza serena. A mi lado, pinos torturados por los años custodian el sendero.

El camino juega conmigo, sube y baja al ritmo de cráteres extintos, se difumina en un laberinto. Hace rato que no encontraría la salida.

El bosque es un ser vivo que palpita hermético, un ente indefinido que controla todo lo que  penetra en él.

Estoy siendo puesto a prueba, avanzo con la seguridad de ser observado. Susurros de conversaciones furtivas se deslizan por las ramas.


Sumergido en las sombras me sacudo el barro del ánimo, y solo consigo manchar más cada palabra. Busco respuestas entre las acículas.

«¿Qué necesidad me empuja?»

Quizá dejaron de interesarme mis propios sueños y he pasado a convertirme en una suerte de oráculo que en vez de visionar el futuro, revivo el pasado.


Con la caída del sol se ha levantado una leve brisa y el aliento forma nubes evanescentes.

En el ambiente se condensa un lamento triste, es un lamento apagado; un lamento emitido en el idioma no escrito del dolor.

 Con él una niebla deshilachada me rodea, retuerce las formas, de la oscuridad brotan volutas informes que a cada paso afinan su corporeidad, son los caídos, portan sus viejas armas cubiertas de óxido y derrota. No hay gloria en la visión de estos rostros marcados por el abandono.

Mis huesos se unen a la queja y protestan. Acurrucado en una cicatriz del suelo, siento el rumor perdido de antiguas explosiones. El olor a quemado satura el espacio, de la nada surgen monstruosos carros de combate. 

Una tras otra, multitudes uniformadas, como en un espectáculo sin fin, esparcen el sabor agrio de la muerte. Las horas caen heridas. Cada imagen vomita su delirio de cuerpos mutilados, la tierra se suspende en el vacío. Llueven aviones desmembrados y en su caída siembran el silencio en el campo. El aire tenso hasta ahora, queda perplejo, por fin se respira calma.


La razón ha luchado durante horas por no perderse. Las primeras luces me arrancan de la locura.
Tras una noche alucinada, ejerciendo de oficiante en el fango, parece alcanzada la catarsis purificadora. Tras haberle prometido no olvidar lo soñado, lo vivido; el bosque se muestra generoso como un dios clemente y me devuelve al camino.

sábado, 9 de abril de 2022

Error de coordenadas

Fotografía de Mikhail Nilov en Pexels

 Aún suena la alarma que me ha sacado del sueño inducido, al parecer debería de haber llegado a destino.

En la pantalla parpadean con furia avisos urgentes. En uno la Federación transversal me pide que me mantenga en la posición hasta nueva orden; en otro, La santa corporación liberal, pide que regrese inmediatamente, como si regresar fuese posible.

Por el contexto deduzco que en la tierra ha vuelto a estallar otra guerra civil.


Mientras, los sistemas vuelcan datos que no necesito leer para comprender la situación. Lo que se ve a través de la cúpula panorámica no necesita ser explicado y me hace sentir cabreada, muy cabreada…


Mañana tendría que celebrar en la base, con los compañeros, la llegada y mi cumpleaños, ahora no hay nada que celebrar.

En años luz, alrededor de la nave, no encuentro ni una mota de polvo, solo la inmensidad del vacío. Totalmente desorientada, tardaré horas en saber en qué cuadrante he acabado y lo que peor llevo es que este año tampoco comeré tarta.




Pd.: Relato escrito siguiendo la propuesta del blog: Acervo de letras, VadeReto del mes de abril. Relato de Ciencia ficción en el que un pasajero alcanza su destino, mira por una escotilla y...


martes, 5 de abril de 2022

La puerta de las maravillas

 Ahí, dónde confluyen los caminos. La leyenda cuenta, que un crucero de piedra señala la puerta secreta, y que por ella es posible asomarse a otros mundos.

Alicia, ya anciana, se dirige a ella sin esperanza. Busca iluminar los rincones oscuros de su infancia. En un atardecer irreal de lapislázuli. Un leve aroma de alhelíes la incita a continuar; a no darse por vencida.

En el cielo, Venus, recién levantada brilla solitaria. Debe ser la hora mágica. Un unicornio mítico recorta su silueta en el horizonte. Una lágrima de felicidad le susurra que no soñó.




Pd.: Relato escrito siguiendo la propuesta de: El blog de lidia, Escribir jugando, correspondiente al mes de abril. El relato debe tener menos de 100 palabras y hacer alguna referencia al Lapislázuli, opcionalmente puede haber una referencia a la flor del Alhelí.



lunes, 28 de marzo de 2022

jueves, 17 de marzo de 2022

Conflicto, nudo y desenlace

 

Fotografía de Russ Ward en Unsplash


Entro en el ascensor, dejando atrás una turba dispuesta a lincharme, sin embargo la angustia y el malestar van a más, me falta el aire, no puedo respirar. Todo es muy rápido y quedo tendido en el interior de la cabina.

Los personajes se han amotinado, ninguno ha querido ser el protagonista, he tenido que ser yo el muerto para poder acabar la historia.



Pd.: Microrelato presentado para el MIcrorreto: Un cadáver en el ascensor, del Blog El tintero de oro.


viernes, 11 de marzo de 2022

La carrera

Fotografía de Deon Black en Unsplash

 En un episodio de clarividencia, a la alegría de la victoria y el orgullo de ser el primero entre millones de hermanos, siguió la duda de por qué los demás no parecían tener el mismo afán en alcanzar la meta. A los nueve meses nací llorando.

sábado, 5 de marzo de 2022

Lago de sombras

 

Fotografía de Anthony Cantin en Unsplash

Ya he asumido que estoy perdido. No logro encontrar el camino, el ramaje se cierra y se empeña en castigarme la ropa y el cuerpo.

Agotado hago un alto, llevo horas caminando sin rumbo, atravesando una espesura que me niega su mano. El aire aquí es cálido, viscoso, casi irrespirable. La ropa pegada al cuerpo complica, aún más, los movimientos.

Todo es quietud, los seres que aquí habitan se cuidan bien de guardar silencio, más allá del latir de mi corazón, no se escucha nada.

Entre la penumbra, por fin, alcanzo a ver una señal. Sus letras borrosas ofrecen un camino a la esperanza.

 ―C A R C O S A―

Un resplandor de lunas negras anuncia una cabaña junto al lago. A través del cristal apenas escapa el amarillento brillo de una bombilla solitaria. Al cansancio se une un temor sordo, el cuerpo no quiere obedecer.  El último paso me asoma a la ventana…

He asumido que estoy perdido, que para mi, no hay camino.


Pd.: Micro escrito para VadeReto del Blog Acervo de letras en su convocatoria del mes de marzo.

jueves, 3 de marzo de 2022

Llueve

 

El reloj se ha detenido, creo qué está dormido.


Don Danilón, copa en mano, observa recién sentado.


Un ave del buen agüero

lo acompaña posada en el sombrero.


Sobre montañas altivas

las nubes bailan de puntillas.


Una catapulta ladina sonríe, apunta…

Y para sorpresa de la gente llovió vino de repente.

El reloj sobresaltado, pregunta ―¡¿Qué ha pasado?!―

Don Danilón, copa, ave y sombrero; 

ríen tirados en el suelo.




Pd.: Poema/cuento escrito para la convocatoria del mes de marzo del blog: El blog de Lídia, tema relacionado con la carta y el dado, y opcionalmente la catapulta. Máximo 100 palabras.


martes, 1 de marzo de 2022

Jugar a la guerra

Fotografía de Orlando Vera en Pexels



 Corro y mientras corro, tiembla el suelo, en él se esconde el rugido de los motores.

Inseguro me refugio tras los escombros y en ese esconderse me reencuentro con el niño alegre, inconsciente que jugaba a ser mayor.

Las explosiones se extienden junto al humo sobre el paisaje.

El pasado titubea, se transforma en sangre y la realidad son agudos alfileres que estallan en mis oídos.

Tengo las manos sucias de la vida que escapa. Con ojos turbios busco al niño que juega entre sombras.

Creo qué me espera.


lunes, 21 de febrero de 2022

El tintero de oro

 

 

Este blog no tiene otra  misión que la de servir de lugar de encuentro en el que contar o leer historias, hoy quiero compartir el trabajo recopilatorio que a realizado David Rubio, en su blog El tintero de oro. La recopilación incluye 39 micros de otros tantos autores. Incluido uno mío, ya presentado en su día, en este blog.

Aquí se puede leer en móvil y otros dispositivos, sin necesidad de descarga.

El club de la Microficción nº 1: Fobias (yumpu.com)

Se puede descargar en PDF en:

Lektu - Descargar Ebook El club de la Microficción nº 1: ¡Fobias!


Aprovecho para dar las gracias y la enhorabuena por el trabajo realizado, a todos los que han participado con su esfuerzo y buen hacer en la presentación de este volumen.

miércoles, 16 de febrero de 2022

A tiempo la luz

Fotografía de Cottonbro en Pexels

 He llegado hasta aquí y a cada paso creo ser más pequeña o al menos así me siento, avanzo encerrada en una letanía de entrega.

―te daré mi vida… mi vida y mi amor―.

Al traspasar el umbral se me pone el vello de punta, debe ser el frío que se refugia tras estos gruesos muros o la emoción, sin embargo, no consigo conectar con todas esas hermosas sensaciones que se le suponen a un día como el de hoy. 

Otras muchas, antes que yo, pasaron por lo mismo y ahora parecen querer escapar de algún rincón del recuerdo. Las escenas se suceden en una función en la que cada una tiene su peso.  


«Sus rostros son mi reflejo, y en mi mano veo las suyas, la de la abuela a la que ni tan siquiera preguntaron, la de mi madre dócil y resignada,  mi hermana a la que el tiempo heló la sonrisa.»


El anillo de oro tiene un efecto magnético, sacude mis pensamientos devolviéndome al aquí y ahora. Todas las miradas confluyen en el dorado brillo. Yo en cambio, te busco a ti y encuentro a un desconocido.

Los segundos pasan y la atmósfera del templo vibra, se tensa. Las miradas mudan su destino y es en mí, en quien depositan su perplejidad. 

Las piernas me flaquean ante este despertar, la duda cuaja en convicción y hace que me asiente con firmeza sobre los tacones, un movimiento decidido basta y la cola del vestido pende de mi brazo. 

Sobre mi espalda desnuda resbala un murmullo de indignación, hay quien amaga con seguirme. Con cada paso la confianza crece, algo ha cambiado, soy la misma y a la vez distinta, en cierto modo creo que conmigo vienen todas. 

Tras la puerta del templo, la tarde encendida me recibe radiante.



Pd.: Historia presentada fuera de concurso para el blog El tintero de oro, en su 30ª edición, Desayuno en Tiffanny's de Truman Capote.