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| Fotografía de Mi Phan en Unsplash |
He perdido la cuenta de las vueltas que le he dado a la casa, ella continúa empecinada en bajar las persianas, y por un lado la entiendo, pero esta oscuridad me asfixia y por supuesto no pienso encender la lámpara. El ambiente está tenso y no tengo ganas de discutir. Es este calor el que hace que nos volvamos locos. Prefiero arder en la calle.
La luz me ciega, desde que he salido noto la camiseta pegada al cuerpo y las manos pegajosas. Somos pocos los que nos atrevemos a andar por la calle. Me enciendo un cigarro y trato de calmarme. Justo en la placita los chavales juegan con los aspersores, me extraña verlos funcionar a esta hora.
Como un chiquillo más me acerco al agua y a su frescor. No me importa mojarme.
Empapado, con la lluvia del riego, el día cambia de color, por un momento he visto al niño que fui. El poco aire que corre me pone la piel de gallina.
El cigarro, húmedo, ha terminado por apagarse. Es una lástima pero será mejor que me arme de paciencia y vuelva.
Yo me quedaría ahí un buen rato más Ángel, bajo los aspersores. Me ha encantado tu relato. Besos :D
ResponderEliminarMargarita, eso sería lo mejor.
EliminarUn beso.
Gracias Mari Carmen, por tus palabras.
ResponderEliminarUn beso.
Quizá necesite el protagonista de tu historia, que dure un poco más la vuelta a la niñez. De vez en cuando nos sana volver. Nos hacemos mayores y olvidamos lo sencillo, lo limpio y la dulzura. Buen relato.
ResponderEliminarBesicos muchos.
La niñez es una nube normalmente envuelta en felicidad, todos necesitamos visitarla de vez en cuando.
EliminarUn beso, Nani.
A veces es mejor no volver.
ResponderEliminarUn saludo.
Alfred, tienes razón, pero si a la mínima nos vamos estaríamos todos solos.
EliminarUn saludo.
Todos somos niños en esos momentos.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo.
Rocío, un aspersor y mojarnos a su paso nos devuelve a la niñez a poco que sepamos disfrutar de ello.
EliminarUn beso.
Al paso que vamos necesitaremos aspersores salvadores hasta en invierno.
ResponderEliminarAún recuerdo que de niño saltaba en invierno sobre charcos helados... en Barcelona hace muchos años que no se hielan los charcos...
Saludos.
Según está el clima, cualquier cosa es posible, miedo me da cuando nos coja una sequia
Eliminarun poco seria.
Un saludo.
Hola Angel, descubriendo tu blog y agradeciendo tu visita a uno de los míos.
ResponderEliminarHermoso micro dejas, por lo que veo bastante real. Aquí estamos en invierno pero no es difícil imaginar lo que están pasando ustedes con ese calor infernal. Realmente cuando esto sucede no se sabe en donde es mejor estar.. Me gusta ese giro que le has dado al "animarse" no solo a salir sino a volver a ser niño, al juego...a tomar aunque sea por un rato , algo que parece terrible, desde el juego y la espontaneidad del niño. Muy bonito. Te dejo un abrazo grande!
Eli, gracias por tu visita y tus palabras.
EliminarUn abrazo.
Sabes en todas partes el clima
ResponderEliminaresta muy variado, donde hacia
frio hace un calor infernal,
aqui por ej. este ano a sido
un infierno el verano, insoportable
dormir en las noches, la verdad el frio
te abrigas y ya, pero el calor,los ninos
se divierten igual calor o frio.
Besitos dulces
Siby
Siby, soy de tu opinión, prefiero el frío a este calor.
EliminarUn beso.
Tenemos tendencia a bajar las persianas cuando hace calor afuera, de este modo creamos una especie de cueva en casa para que no entre el calor, pero la verdad es que dejamos todo a oscuras. A mí no me gusta. Prefiero la claridad. Que se vea bien. Que entre luz por las ventanas. Y nos invadan los rayos solares. Que el verano se vive una vez. Pero siempre nos quejamos. Cuando hace frío porque hace frío cuando hace calor porque hace calor. Y salimos a la calle y nos encontramos con más calor. Y seguimos quejándonos. Pero a mi dame esto que no el invierno.
ResponderEliminarMe ha encantado tu micro, Angel.
Un abrazo.
María, la verdad que se agradece cuando entras de la calle, al menos en mi casa si tienes todo cerrado y las persianas bajadas, nos el fresco al entrar de fuera, pero es una lata.
EliminarYo, al contrario que tu prefiero el invierno, y el otoño me encanta.
Un beso.
Suele extrañarse ese tiempo, el del niño que uno fue.
ResponderEliminarAlexander, ese es un territorio al que de vez en cuando gusta regresar.
EliminarUn saludo.
Si ya llsbabas la ropa pegada al cuerpo , que más da que la humedad sea propia o de aspersor. Confiesa que te daba vergüenza que te vieran... A tu edad... jugando con el agua en una plaza.
ResponderEliminarEn casa te ahogas y fuera te asfixias...
Saludoss
Pues también tienes razón, jajaja. Y puestos a ir empapado mejor de agua.
EliminarUn saludo.
Salir sienta bien, aunque sea a buscar refugio entra la lluvia de algún aspersor amable.
ResponderEliminarBesos.
Si un paseo muchas veces ayuda a despejar las ideas.
EliminarUn beso.
El agua refrescando piel y sentimientos, capaz de dejar que sintamos el niño o niña que adormece en nuestro interior pugnando por salir..
ResponderEliminarEsta sensación vivida ha sacado de ti una reflexión que he leído con placer
Un abrazo
Carmen
Carmen, muchas gracias por tus palabras y por tu visita.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas veces hay ciertos detalles que nos llevan a cuando éramos niños, pero qué caramba, ¿Por qué no sacarlo a pasear de vez en cuando?
ResponderEliminarSAludos.
Manuela, creo que es el pudor, pero no sería mala cosa que todos pudiéramos sacar al niño juguetón y mimoso que escondemos.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Ángel, qué buen relato te ha quedado. En verdad a veces hay momentos que nos hacen olvidarnos de todo, de las penas, y regresamos a un momento feliz. Lástima que tu protagonista deba regresar a su presente. Un abrazo.
ResponderEliminarGracias por comentar, de pequeños momentos como este se compone muchas veces la felicidad.
EliminarUn abrazo.
Me quedaria un momento mas para seguir conectando con mi niña interior.
ResponderEliminarabrazos
Bella, no seria mala idea.
EliminarUn abrazo
¡Qué chulo instante el que describes! Cuídate mucho y disfruta de los pequeños momentos.
ResponderEliminarAbrazote utópico.-
Como disfrutar de tus noticias utópicas.
EliminarIrma, muchas gracias por pasarte.
Un abrazo.
Al leerte, inmediatamente me ha venido una canción a la cabeza... pero en versión adulta, sin chapoteos.
ResponderEliminarBesos.
https://www.youtube.com/watch?v=Q_LPp6-DTKc
Laura, ya te contare, que ahora no tengo tiempo.
ResponderEliminarUn beso.
No tengo escuchado a Love of lesbian, y la verdad que me alegro si la historia te ha evocado esta canción, que me ha encantado. Gracias por "descubrirme" a este grupo.
EliminarOtro beso y que pases una buena tarde.