Fotografía de Antonio Poveda Montes en Unsplash |
El precio de una vida exuberante estos árboles lo pagan cada año con la bella caída de sus hojas. Tu vida de ostentación, también tiene un precio y ciertamente no hay belleza en las excusas.
Voy a tu encuentro decidido, los nervios del último momento los pierdo al comprobar el arma. Hace un día espléndido muy distinto de esos días grises que pintan las novelas.
Vives en un buen barrio. No te gusta madrugar y a pesar de lo avanzado de la mañana las calles se mantienen desiertas, mejor, así no habrá malos encuentros.
Hago el stop y giro sin prisa en la esquina, debes hallarte en la puerta de tu casa.
Cuatro o cinco personas y la que creo que es tu mujer rodean un coche fúnebre. Detengo la moto y observo. El conductor apoyado en el coche espera el momento de la carga, le pregunto y confirmo que hoy no trabajo, tu corazón ha tenido el buen gusto de pararse solo, ahorrándome la bala.
No está mal tener el día libre.
No lo voy a negar, alguna vez se me ha pasado esto por la cabeza... y salir indemne (y si encima es en un día libre mejor, así lo celebro a lo grande) jajajaa
ResponderEliminarBesos.
Laura, y a quien no se le ha pasado por la cabeza, menos mal que solo son malos pensamientos, si no aquí no quedaría nadie.
EliminarUn abrazo.
La casualidad hizo el trabajo sucio. No hay mal que por bien no venga.
ResponderEliminarUn saludp.
Ahora habrá que saber si cobra, lo mismo le vienen a él con excusas y es que son tan aburridas.
EliminarCayetano, gracias por comentar, que tengas un buen domingo.
Mira que si se le ocurre madrugar ese día , y cuando llegas ya se han ido...qué putada! No saber si tienes el día libre o no...
ResponderEliminarSsludoss
Pues si, le hubiera tocado de volver y perder el tiempo hasta enterarse. Pero hacia un buen día y a él todo le salió bien, no todo van ha ser desgracias.
EliminarQue tengas un buen domingo.
No entiendo cómo funciona este blog. Pone que es de varios autores pero cuando pico en alguno de ellos, sale como blog lo de contando bajo la lluvia , y pico ahí, pero todos los textos que hay son tuyos.
ResponderEliminarSaludosd
Gabiliante, el problema seguramente es porqué entras en el blog desde el móvil, este blog lleva funcionando desde 2010 y cuando más movimiento tuvo fue entre 2010 y 2012, luego fue decayendo. Yo llevo un año y algo poniendo mis "cosas" y en ese tiempo solo Beatriz Basenji y Manuela Fernández han publicado en él, alguna historia y un poema.
EliminarPara leer desde el móvil tienes que ir bastante para atrás, te aconsejo, si puedes leer desde un ordenador y si no pinchar en el móvil donde pone "ver versión Web" a la derecha sale una columna y es más cómodo navegar por años o autores.
Un saludo.
Perdona, Gabiliante, para ver los textos de cada autor es en la columna que pone: Etiquetas, el numero que figura al lado es el numero de entradas de cada uno.
EliminarUn saludo de nuevo.
si, si. ahora en el ordenador lo he visto. en el movil picaba en autores, pero no llegue e ver las etiquetas. ahora en el ordenador sí.
Eliminargracias, saludos
Pues si te animas, para mí gusto hay historias muy buenas. Aquí soy yo el que no tiene ni idea de juntar dos letras.
EliminarQue tengas un buen domingo.
¡Oh! ¡Día libre! La verdad es que el difunto le ha hecho un favor, ja ja. ¡Me ha encantado! Besos :D
ResponderEliminarMargarita, es que trabajar de sicario y que se te mueran los parroquianos es una bola. Jajaja
ResponderEliminarMe alegro si te ha gustado aunque sea un poco. Un beso y buen domingo.
La madre naturaleza que nos pare también asesina, simplemente deja actuar a los ciclos vitales, tan personales ellos, y de negocios turbios justicias por la mano no sabe. De eso solo sabemos los hijos de mal vivir.
ResponderEliminarFackel, en el mismo momento que se nace debemos o deberíamos de saber que el juego tiene un fin. El don de la oportunidad es algo que a la naturaleza se le escapa, eso es cosa nuestra.
EliminarUn saludo.
Vaya casualidad, hay trabajos con enormes sorpresas. Muy bueno el relato!!
ResponderEliminarBesicos muchos.
Nani, sorpresas hay en todas las profesiones, algunas más gratas que otras. Me alegro de que te haya gustado.
EliminarUn beso.
Hola Ángel, muy buen relato. La introducción es muy buena y cuando ya sabemos que va a pasar, resulta que la muerte se le adelanta. Me pregunto si no se quedaría un poco frustrado. Si era algo personal seguro que sí. De cualquier forma, tener día libre queda increíble. Saludos...
ResponderEliminarAna, salvo que sea un sádico en ese trabajo los días libres se deben de agradecer.
EliminarMe alegro de que te gustara.
Un abrazo.
No sé yo si le pagarán lo acordado.
ResponderEliminarComo mínimo los gastos del desplazamiento.
Aunque no creo que tenga convenio colectivo al que acogerse.
Saludos.
Hombre, imagino que antes "de" ya habrá pillado algo y con el día libre, pues tan contento y si no, que prueben a cabrearle.
EliminarUn saludo, Toro, gracias por pasarte.
Realmente creo que no hay mal que por bien no venga. el universo sabe porque hace las cosas
ResponderEliminarBella, las cosas suceden unas veces en contra nuestra y otras nos favorecen. Como tu dices el universo sabrá.
EliminarUn saludo.
Ya le había llegado lo suyo, sin tener que intervenir más allá. A veces así sucede.
ResponderEliminarAlexander, pues si a veces las cosas se solucionan por si solas.
ResponderEliminarUn saludo.
Seguro que se dan y peores, en fin que nos no pille nunca por medio.
ResponderEliminarMari Carmen, gracias por tus palabras. Buen jueves.
No hay bala perdida por lo menos esta vez, ni tan siquiera encontrada.
ResponderEliminarAbracines utópicos.-
Irma, y lo tranquilo que se puede ir de cañas, ¿Qué? un día libre así, sin esperarlo está pero que muy bien.
EliminarUn Beso.
¡Hola, Ángel! Muy buen micro en el que el destino le robó su presa, quién sabe si por venganza o por puro odio, el caso que es que esa bala con un nombre escrito se quedó en la recámara. Ese final me deja poniéndome en la piel del protagonista, pensando en sus sentimientos y su futuro, en el que aquello que pretendía liberar seguirá ahí y preguntándome si le basta con la muerte o si eso no era suficiente. Micro con alta carga de profundidad. Saludos!
ResponderEliminarGracias David, lo bueno de las historias breves es la cantidad de caminos que puedes imaginar para completarla.
EliminarUn saludo.
Inesperado final, un abrazo.
ResponderEliminarUn beso, Amapola y gracias por pasar.
EliminarHola, Angel. Lo que me gusta es la potente voz del narrador que has utilizado para dotar al relato de credibilidad. El final es buenísimo, con ese giro truculento de la muerte. Un saludo.
ResponderEliminarMe alegra que te haya gustado, intento hacer que los relatos sean "creíbles" que parezcan una historia que hubiera podido hacerla alguien que sepa escribir.
EliminarUn saludo.
Quizás solo se quede con el adelanto ya que la madre naturaleza hizo el trabajo sucio.
ResponderEliminarSiempre me sorprendes, Ángel :)
Abrazo
En cualquier caso, creo que sintió alivio al no tener que actuar.
EliminarSi al menos he conseguido distraerte por un instante me doy por satisfecho.
Un abrazo y gracias por pasar.
La naturaleza le hizo el trabajo. Seguro que no cobró.
ResponderEliminarUn abrazo.
No sé, con este tipo de personas a lo mejor toca de pagar igual.
EliminarUn abrazo y gracias por comentar.