Esta mañana, casi lloro. Primero, por ver que otro año más la bicicleta tendrá que esperar. Después, por la emoción de los paquetes sin abrir.
Mamá insistió como todos los años. Me fui pronto a la cama. Los reyes no entrarían en casa de un niño desobediente y no volverían si me encontraban despierto.
Resistí lo que pude, la emoción y los nervios no me dejaban. Que ilusión verlos… pero me dormí.
Todavía no era de día y papá me ha despertado a voces, mamá esperaba en el salón. Su cara de alegría, fue el mejor regalo.
Cualquier ocasión es buena para hacer fiesta, y hoy no iba a ser menos. Asado, roscón; café y champán. Luego las copas, siempre las copas.
No he salido de mi habitación nada más que a comer. He estado jugando, concentrado, sin querer escuchar.
Las risas, hay que entenderlas, hay risas alegres que saben a fresa, risas de felicidad; y hay risas turbias, que huelen a tormenta. Son risas histéricas, bañadas en vino y gin-tonic. Esas no me gustan. Rápido dan paso a los insultos.
―Ladra chucho que no te escucho ―repito en mi cabeza, mientras dura la pelea. Con el ruido del primer vaso roto, la humedad y el calor se extiende, se me ha vuelto a escapar, con la pernera del pantalón trato de secar el charquito acusador, el pantalón acaba empapado. No pude evitarlo. Ahora sí lloré.
Me gusta imaginar, y con las rayitas del parqué juego. Son largos caminos que me llevan lejos, que me sacan de debajo de la cama, donde no escucho los gritos, ni los llantos.
Una noche, mamá, cuando yo sea grande, aunque no vengan los reyes, saldré de mi refugio y te regalaré una vida sin gritos.
Muy bueno, deriva en una bronca de padres que para un niño, es la tragedia en persona. Vaya churro de Reyes por muchos juguetes que dejaran los reyes.
ResponderEliminarPrecioso post. Muy realista. Un abrazo grande, y feliz navidad
La tranquilidad en casa es de los mejores regalos que existen.
EliminarGracias, por tus palabras.
Feliz navidad. Un abrazo.
¡Qué triste episodio! Me gustaría que ningún niño del mundo tuviera que vivir estas cosas. Es un texto que impresiona y llega muy adentro.
ResponderEliminarFeliz navidad y mis mejores deseos, Ángel
Un abrazo
Rita, gracias por pasarte, y sí, sería bueno que nadie tuviera que pasar por cosas así.
EliminarUn abrazo y Felices fiestas para ti y los tuyos.
Tremendo. No puedo imaginar un día de reyes así.
ResponderEliminarUn saludo
Por desgracia los habrá peores.
EliminarJesús, gracias por pasarte y comentar. Que pases unas felices fiestas.
Un saludo.
Tan duro y real, como hermoso. Desgraciadamente, el espíritu de la Navidad no se disfruta por igual en todos los hogares…
ResponderEliminarMuy buen relato, Ángel.
Vengo a dejarte mis deseos de felicidad para ti y los tuyos, en estos días que nos llegan, así como en los venideros.
Un abrazo grande, y muy feliz Navidad.
Ginebra, muchas gracias por pasarte y comentar.
ResponderEliminarIgualmente, te deseo unas felices fiestas para ti y los tuyos; y un 2021 que sea bueno de verdad.
Un abrazo.
Magia, luz, color, amor en estos días de Navidad y para todos los días del año.
ResponderEliminarTe deseo una Feliz Navidad y que todos tus proyectos se cumplan en el 2021.
Besos enormes.
Gracias María, igualmente, Felices fiestas y que el año entrante sea bueno de verdad.
EliminarUn beso.
Un relato duro, pero precioso.
ResponderEliminarQue tengas felices fiestas y un abrazo.
Gracias Rocío, por tus palabras.
EliminarFelices fiestas para ti y los tuyos. Un abrazo.
Es duro.
ResponderEliminarY me ha despertado recuerdos duros.
Felices Fiestas Ángel.
Toro, lo malo es que la realidad siempre supera a la ficción.
ResponderEliminarUn saludo y Felices Fiestas.
Cada casa dicen que es un mundo. Y los hay tan crueles...
ResponderEliminarSAludos.
El mundo no es perfecto y las personas menos aún.
ResponderEliminarGracias por comentar. Un saludo.
pRECIOSO cuento, como todos los tuyos, Angel.Nos hizo viajar a nuestra propia infancia de hija única !
ResponderEliminarGracias Beatriz, que pases unas felices fiestas y que el 2021 te llegue cargado de felicidad para ti y los tuyos.
ResponderEliminarFeliz Año Nuevo.
ResponderEliminarSerenidad y mucha salud para todos.
Fascinante tu historia pero me he quedado nostálgica; lograste llevarme a esos momentos y me fui con vos de la mano...
ResponderEliminarDesde luego dan ganas de cerrar la puerta e irse. ¿Pero a donde?
EliminarGracias por comentar y feliz año.
Un relato muy emotivo... muy bien llevado, uno empatiza con el chico y siente su angustia. Creo que no le falta ni le sobra nada. ¡Que tengas bonito inicio de año Angel!
ResponderEliminarGracias Tigrilla. Un saludo.
ResponderEliminarImponente relato, cargado de crudeza, realismo y esperanza. Lo he leído tres veces y no deja de conmoverme.
ResponderEliminarUn abrazo Ángel y feliz 2021
Miguel, gracias por tus palabras.
ResponderEliminarUn saludo y feliz año.