viernes, 7 de enero de 2011

EL SUEÑO DE ORDO, EL NIÑO SORDO


 Ordo camina todos los días unos cuantos kilómetros, desde su cabaña hasta el pozo del agua. Antes de ir a la escuela, debe acarrear, cada día, el agua necesaria para la jornada. Aún no ha salido el sol, cuando se pone en camino con una gran vasija que porta en la cabeza. Un día, nota una nueva vibración detrás de él en el camino. Ordo se para, tiene miedo de volver la cabeza y encontrarse con una alimaña, poco a poco supera el miedo y vuelve la cabeza, para su alegría, se encuentra con un sueño: un hermoso perrito de hocico chato y pelaje corto, le mueve la cola en señal de saludo.
            - Hola amigo, me llamo Erro, guau, guau ¿Te gusta como ladro? Por favor déjame que te acompañe, estoy solo y me da miedo andar por la vida así.
            Ordo quedó boquiabierto y sus enormes ojazos enviaron un cariñoso saludo al chucho.
-Hola – le dijo con gestos. No sé lo que me dices porque soy sordo, pero por favor no te vayas, me gustaría tanto que te quedases a mi lado para acompañarme a por agua todos los días. No sabes que triste es andar este camino cada día solo.
Erro lo miraba atónito, nunca antes había visto a ningún humano gesticular tanto ¿Qué le pasaría al chico? Además no lograba oír ningún sonido de esos habituales en los humanos. De todos modos resolvió seguir a su lado porque la mirada de aquel muchacho le daba paz.

Manuela Bodas Puente – Veguellina de Órbigo.

4 comentarios:

  1. Lindo y como dice Rosa, tierno relato. Muy bien logrado. Felicitaciones Manuela.

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  2. Bien venida, querida Manuela. Un buen regalo de sábado leer tu relato y saber que te enganchas a este tren; una maestra más para esta aventura de escribir. Un besazo muy fuerte. Charo Acera.

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  3. Bienvenida amiga entre nosotros¡

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